Cuento Infantil para niños, escrito por: Carlota Suárez Villaverde y Daniel Avila López
La princesa estaba enamorada de un chico, siempre lo veía desde su alta torre. Él era muy guapo, de cabello oscuro, sus ojos muy claros, su piel pálida y sonreía a cada instante. Parecía no tener preocupaciones, era feliz.
Al parecer era un joven de pueblo que venía de transportar mercancía con una carretilla, pero aunque era muy humilde y era campesino, él siempre trabajaba con una gran sonrisa.
– Parece feliz. – Dice la princesa.
La princesa no era tan feliz, aunque tenía de todo, no la faltaba nada. Y se preguntaba:
– ¿Por qué este chico es tan feliz? No para de sonreír, ¿como es posible?
Un día, el campesino llamó a la puerta del castillo donde vivía la princesa. Contestó un guardia:
– ¿Que quieres?
– Vengo a traer unos paquetes de comida para la princesa.
Al oír la conversación la princesa bajó corriendo a la puerta, ya que esos paquetes los había pedido ella para poder observarlo de cerca.
– Son para mí. – Añadió ella.
– ¡Aquí los tiene!
El campesino los coloca sobre el suelo y cuando pretendía marcharse, la princesa le pregunta:
– ¿Puedes quedarte un poco?
– No, lo siento, tengo que irme a casa con mi mujer…- Contestó él.
Ella estaba muy triste, sobre sus mejillas caían lágrimas sin parar.
La mujer del campesino fue encarcelada por un delito que no cometió. El joven se casó con la princesa. Y ella ahora si era feliz, o eso creía. Pero el joven no volvió a sonreír nunca más. Todo por complacer los deseos de la princesa.
Ella siempre vivió criada entre almohadas, todo se hacía a su antojo, pero no podía seguir siendo egoísta. Pasado un tiempo la princesa se dio cuenta del gran error que había cometido y rectificó. Explicó al campesino que lo había hecho por amor, pero eso no justificaba nada. La princesa liberó de los calabozos a la mujer del campesino para que volvieran a estar otra vez juntos y fueran felices.
FIN
Moraleja del cuento: Nunca nadie debe creer que con ayuda de su poder es superior a otra persona. O causará la tristeza. Hay que ser felices con lo que cada uno tiene y ayudar a los demás a que también lo sean.
Valores del cuento: Tolerancia hacia sentimientos ajenos. El amor. Respeto.
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ese cuento es muy lindoooooooooooooooooooooooooooooooo.
Es el cuento más bonito que he leído
están muy divertidos
me gusto ese cuento
me encanto !!!
me dejó la boca abiertaaaaa
wuao! me has dejado con la boca abierta, es el mejor cuento que he leído. Yo también escribí uno, se llama «La Princesita Chocolate». Además tienes mucha imaginación.
Camila
Muy bonito