Cuento Infantil para niños, creado por: Graciela Lorena Bogado
En una cabañita, Juliana, una señora buena, terminaba de coser una muñeca que había hecho con unos retazos de tela. Al mirarlo pensó: – ¡Que linda me quedo!
Y como la muñeca había sido hecho de tela, Juliana decidió llamarla Telita.
Aquel día, Juliana se fue al pueblo a entregar las costuras que había terminado. A su casa llegoó un Hada Madrina y viendo a Telita tan linda, cogió su varita mágica y le dio un corazón a la muñeca.
Al llegar a su casa, sorprendida, Juliana vio que Telita se movía, caminaba, se reía y hablaba como una niña de verdad. Contenta y muy orgullosa mando a Telita al almacén a comprar hilos. Quería que conociera a las personas y se hiciera de amigos. Pero en el camino Telita se hizo amiga de un duende muy malo y travieso, siguiendo sus maldades, desobedeciendo los consejos de Juliana. En lugar de ir al almacén, Telita decidió seguir a su nuevo amigo, haciendo cosas malas.
Al ver lo que sucedía, el hada buena le hizo un hechizo por desobediente y portarse mal. Le puso dos orejas de algodón y una nariz de botón.
Telita asustada, decidió buscar a Juliana. Salió a buscarla por todos lados y no la encontraba, la
viejecita enfermo de tristeza.
Telita, con la ayuda del hada buena pudo escapar del duende malo y regresó a casa.
Cuando estuvo frente de Juliana la abrazó y le pidió que la perdonara.
Telita a partir de ese día siempre se portó bien y fue una niña bondadosa.
En recompensa por ser buena el hada la convirtió en una niña de verdad.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
FIN
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