Cuento Infantil para niños, escrito por: El Equipo de Cuentos Infantiles Cortos
Perico tenía trece años y era un chico muy despierto y activo. Sus padres siempre estaban pendiente de él, enseñándole y haciéndole entender el mejor camino hacia la felicidad.
El niño no se cansaba de las disertaciones de sus padres, al contrario, se sentía atendido por ellos, para él sus padres eran todo lo que tenía. Pero un día en el recreo con sus compañeros, un niño, que no era su amigo, se dirigió a Perico y le dijo:
– «¡Adoptado!, ¡adoptado!».
Perico miró al niño y se sintió muy triste, pero intentó dejar de lado el comentario, porque no lo entendía muy bien.
Al llegar a casa, lo primero que hizo Perico fue preguntar a sus padres el significado de la palabra adoptado. Sus padres se sentaron con Perico y le comenzaron a explicar la historia de su origen.
Perico nació en un pueblecito de Cuenca, donde sus padres biológicos intentaban subsistir diariamente. Cuando Perico era muy pequeño, y después de pasar muchas penurias, decidieron dejar al bebé en la puerta de unos vecinos, para que alguien pudiera sacar adelante a la criatura, mientras los padres buscaban una vida más digna para poder criar adecuadamente a su hijo.
Los vecinos habían decidido no tener hijos, y cuando se encontraron a Periquín en la puerta de su casa con una nota que decía:
– «Mis queridos vecinos, con todo el dolor de nuestra alma os dejamos a nuestro hijo a vuestro cuidado, en cuanto podamos darle una vida digna, volveremos para que nos conozca. Perico es vuestro hijo».
Sintieron algo que jamás habían experimentado, la responsabilidad de cuidar a un hijo, ya que desde el primer momento lo aceptaron como suyo, y sintieron mucho que los padres biológicos no pudieran hacerse cargo del niño.
Así fue como a Perico le contaron que era adoptado. El niño estuvo durante unos instantes con los ojos encharcados en lágrimas y con la mirada perdida por la ventana. De pronto, Perico abrazó a sus padres adoptivos y les dijo:
– «Sois mis padres y por ello os quiero, y también quiero a mis otros padres. Ellos me dejaron con vosotros para darme una vida mejor, que ahora disfruto. Ayudarme a encontrarlos. Seré el único niño del colegio que tenga cuatro padres«.
Entre todos se pusieron manos a la obra, y al poco tiempo, los padres biológicos de Perico fueron encontrados en Cuenca, con sus dos hijas, y con muchas ganas de ver a su primer hijo. Desde que lo dejaron a los vecinos, sus padres biológicos habían estado trabajando muy duro para poder volver a conocerlo, pero por circunstancias del momento, el tiempo iba pasando y ese día no había llegado.
El encuentro fue muy emotivo, todos lloraron y se abrazaron, y comprendieron que nunca es tarde para alcanzar las metas que se proponen en la vida, en la que hay que trabajar mucho, aprender de todo y mirar siempre hacia delante sin que lo triste obligue a parar en el camino.
A partir de ese momento, Perico tuvo cuatro padres, dos hermanas y una vida llena de satisfacciones y buenos momentos, y por supuesto, se sentía muy orgulloso de ser adoptado.
FIN
Comparte este cuento infantil con tus amigos en Facebook, Google+ y Twitter con los botones que encontrarás al final del cuento. ¡Gracias!