DE HOY AL 2049 – Final del Cuento

Cuento Infantil para niños y niñas; creado por: Juan David Oviedo Rios

Los niños no perdieron tiempo, pues tenían en mente su misión: advertirles a las personas sobre lo que pasaría en el futuro. Inmediatamente fueron a la casa del presidente con el fin de comunicarse con todo el mundo.

Cuando los guardias oyeron esto se pusieron a reír:

– «Jajajaja, vienen del futuro, si como no, estos niños tienen mucha imaginación y encima están comiendo mucha azúcar»– «Por favor solo tratamos de advertirles a todos sobre cómo será realmente el futuro»
– «¡Noooo! ¡Y largo de aquí! ¡O los llevo al hospital mental!»

Entonces Simón muy enojado saca de su maleta las fotos y los celulares y se los restriega en la cara a los guardias.

– «¿Como? Celulares modelo 2049, fotos del futuro…»

Y los guardias se quedaron con la boca abierta mientras los niños guardaban las cosas y entraron en la casa.

Con el presidente pasa lo mismo, cuando le dicen que son del futuro se enfada, se le pone la cara roja como un limón y les dice que se vayan o que sino llamarán a seguridad.

Simón confundido y enojado le muestra las pruebas al presidente, el cual se da cuenta de que estos niños realmente son del futuro.

– «Lo siento niños, pero yo no puedo sacar ningún mensaje por la televisión»
– «¡Pero es el presidente! debe poner el mensaje en los medios de comunicación»
– «Niños eso no depende de mí, sino de los dueños de los periódicos y los canales de la tv»

Los niños salen de la casa del presidente muy decepcionados y pasan por al lado de los guardias que aún continúan asombrados, parados ahí con la boca abierta.

Mientras tanto precisamente ese sábado iba caminando de mis clases de inglés y me dirigí a mi casa, entonces de pronto vi a un niño y una niña y los saludé, ellos desanimadamente me contestaron.

– «¿Que les pasa?» – Les pregunte yo.
– «Nada» – Respondió el niño
– «Enserio díganme que les pasa» – Les insistí.
– «Está bien» – Dijo la niña – «Pero no nos creerás»

Resulta que esos niños eran Simón y Tifany, ellos me contaron todo sobre la contaminación del 2049 y todo sobre la máquina del tiempo.
Yo sinceramente si les creí, y más cuando me mostraron las pruebas. Luego de lo que me dijeron yo me quedé pensando un rato y dije:

– «Podría escribir un libro sobre su historia, quizás la gente lo lea y así les preste atención. Además tengo una tarea del colegio y necesito un cuento; y el suyo es una excelente historia»

– «Ok, pero ¿Cómo te llamas?»
– «Soy Juan David Oviedo y tengo 11 años» – Respondí.

Ellos me contaron sus nombres pero me dijeron que en el libro no pusiera sus verdaderos nombres, sino que les pusiera nombres falsos, así que decidí ponerles Simón y Tifany, es decir, los mismos nombres que tienen mis dos gatos.

Mientras yo caminaba a mi casa, ellos me seguían detrás contándome la historia con todo detalle y tan perfectamente cómo podían recordarla, bueno Simón, porque Tifany tiene mala memoria. Cuando llegué a mi casa ellos no habían terminado de contarme la historia y me acordé que mi abuelita no estaba en casa, así que me quedé afuera escuchando su historia, había partes que ni siquiera yo con las pruebas les podía creer.

Cuando terminé de escuchar la historia me puse a hablar con ellos hasta que vi que venía mi abuelita con mi primo y mi tía, así que los despedí, ellos salieron corriendo por toda la cuadra y yo rápidamente entré antes de que mi familia me viera, llegué primero al apartamento y después llegaron ellos.

Al día siguiente (Domingo) me puse a escribir el cuento para la escuela, pero borré el cuento que ya llevaba y empecé otro, es decir, empecé el cuento que Simón y Tifany me contaron.

¡Y si! La historia que acaban de escuchar es la misma anécdota que me contaron Simón y Tifany ese sábado.

Así que aunque Simón y Tifany no pudieron contactarse con la gente del 2014 por medio de la televisión o por el periódico, sí pudieron hacerlo por medio de este libro porque ellos les dicen a todos y en especial a las personas que trabajan en las industrias y fábricas que contaminan el mundo a diario. Les dicen no solo a ellos, sino a todos los seres humanos que todavía hay tiempo para salvar el mundo. Todavía falta mucho para el futuro y que podemos salvar el planeta, no solo de la contaminación, sino también de las guerras y destrucción del mundo, porque todavía hay tiempo de salvar el medio ambiente, ya que tenemos agua, capa de ozono, glaciares, y suficiente oxígeno para todos en el planeta. Pero a menos de que paremos y hagamos algo para detener la contaminación, tarde o temprano estas cosas tan indispensables desaparecerán y moriremos, no por el fin del mundo de los mayas ni de los profetas sino por el fin del mundo que causamos nosotros mismos con las guerras, bombas, destrucción de la capa de ozono, tala de árboles, calentamiento global, contaminación de ríos y lagos, gases tóxicos, desechos al mar, destrucción de habitad natural, industrias, fabricas, automóviles, buses, trenes, barcos, contaminación del agua, superpoblación,… etc. El planeta no puede con todo eso al mismo tiempo.

Porque alguien en un futuro cercano comentará que en el deshabitado sistema solar, el planeta tierra alguna vez llegó a tener las condiciones óptimas para que allí existiera la vida.

Simón y Tifany me prometieron que si los seres humanos dejaban de destruir el planeta, ellos me volverían a visitar, lo que significa que yo dudo mucho que los vuelva a ver alguna vez.

Muy poca gente me creerá esta historia pero no porque sea muy irreal y poco probable los viajes en el tiempo, sino porque inconscientemente piensan que la contaminación es una broma y no lo toman en serio.

FIN

– Moraleja del cuento: Debemos cuidar nuestro planeta y dejar de contaminarlo porque es nuestro único hogar.

– Valores del cuento: Respeto, honestidad, humildad.

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