Cuento Infantil para niños, escrito por: Anayeli y Kass
Carnudo era un perro muy flaco, huesudo y tenía muchas pulgas.
Un día como el pobre Carnudo no aguantaba el picor que le producían las pulgas, se fue a bañar a la playa. Poco a poco se fue sumergiendo hasta lo más profundo del mar de manera que no tocara tierra, pero como ya no pudo aguantar la respiración se salió del agua, pero las pulgas no se le quitaron.
A lo lejos vio una parvada de gaviotas, ellas le preguntaron:
– «¿Qué se te ofrece?»
Y carnudo les respondió: – «Quisiera que se comieran a picotazos las pulgas que traigo».
Ellas le dijeron que si, pero a él le dolió mucho y decidió salir corriendo con su lomo todo hinchado. Pero no se dio cuenta que había dos hombres en una camioneta de la perrera que lo estaban esperando, lo amarraron y lo subieron a la camioneta para llevárselo a la perrera.
Cuando llegó vio a una perrita muy bonita y se acercó a ella, pero escuchó el ladrido de un perro enojado diciendo:
– «Quieto perro pulgoso, no te acerques a mi novia».
Y empezaron una pelea que hasta las pulgas le brincaban. Pero como tenía muchas pulgas los dueños decidieron llevarlo a una selva, y allí se encontraba una loba con sus cachorritos. Aunque era muy flaco le parecía buena comida para sus cachorritos. Corrió y corrió pero la loba lo alcanzó, pero las pulgas lo ayudaron y le brincaron a la loba y le dieron mucha picazón.
Después de esto Carnudo decidió quedarse con todas sus pulgas para toda su vida.
Un día empezó a llover demasiado y Carnudo decidió ir corriendo a refugiarse al mercado, pero no vio que venía un camión de refrescos y lo atropelló. Carnudo falleció con todas sus pulgas. Pasó un camión de la basura y se llevó su cuerpo en donde el basurero fue su tumba.
FIN
– Moraleja del cuento: Aprende a preciar lo que tienes por que quien menos te lo esperas es quien te puede ayudar y salvarte en un momento difícil.
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