Cuento Corto Infantil para niños, creado por: Carlos Alberto Navarro
Dentro de un manantial unos pequeños ojitos se miraban de lado a lado, uno miraba al otro a través de unas pequeñas burbujas.
La rana llamada Ojitos tenía unos ojos transparentes, grandes y hermosos; aburrido se movía muy inquieto queriendo salir.
Pasado ya una semana logra salir nadando de un lugar a otro, una hermosa cola le brotaba y unos brazos pequeños que le permitían parar y sacar poco a poco su cabecita del agua posado en las hojas caídas de los árboles.
Muy aburrido de tanto nadar en su tercera semana una hermosa ranita de ojos color rojo transparente, patas naranjas y verde limón se posaba en una ramita muy aburrido mirando a su alrededor.
Miraba y miraba como una hermosa ave volaba sin cesar por donde quiera, se imaginaba como sería si pudiera volar igual que el ave.
Ojitos ya se había aburrido de la rutina de ser una ranita y se encontró con el señor tucán y le dijo:
– «Señor tucán… le he estado mirando y usted es un ave muy alegre, de colores muy alegres y se pasea de lado a lado volando por esta selva, come frutas y todo el día está cantando y me gustaría ser como usted. Mientras que aquí mi vida es muy aburrida y hago lo mismo todo el día.»
El señor TUCAN le respondió:
– «Ranita, te he estado mirando y veo que saltas de lado a lado, nadas y cantas muy lindo, tienes unos colores muy hermosos y puedes respirar bajo el agua y vivir más años que yo».
Entonces enseguida se dio cuenta la ranita Ojitos que era una rana muy feliz. Y se fue cantando y saltando por el manantial entendiendo que era especial.
FIN
Comparte este cuento infantil con tus amigos en Facebook, Twitter, Google+,… o por Email, con el botón correspondiente a cada red social. Gracias.