Cuento corto para niños/as, creado por: Juan Pablo Urcola (Buenos Aires – Argentina)
Tao y Teo eran amigos, y además vecinos, y como si esto fuera poco también eran compañeros de colegio y hasta se sentaban uno al lado del otro en clases. Siempre andaban juntos, jugaban juntos, comían caramelos y chocolates juntos, salían andar en bicicleta por el parque juntos y juntos hacían una que otra travesura de vez en cuando.
Un día Tao pasó a buscar a Teo por su casa, era sábado, pero en casa de Teo no había nadie. Tao recordó entonces, que su amigo le había dicho unos días antes que todos los sábados por la tarde acostumbraba ir con su tío al campo y visitar a sus abuelos que allí vivían de toda la vida.
Al recordar esto, Tao se entristeció por dos razones muy obvias, la primera era porque no encontró a Teo y por consiguiente el plan de ir a patinar por las veredas del vecindario no pudo concretarse, y la segunda era que a diferencia de Teo, él tenía a sus abuelos muy pero muy lejos y le era casi imposible irlos a visitar. Esto animó a Tao a pedirles a sus padres que le ayudaran esa misma tarde, a escribir una carta para sus abuelos: Sigue leyendo